Aquellos que pasaban al menos 11 horas al día sentados tenían un 40% más de riesgo de morir en los próximos tres años
que los que pasaban menos de cuatro horas diarias en la silla.
A pesar de que se ha comprobado de sobra que el ejercicio físico aporta beneficios para la salud nunca se había tenido en cuenta el riesgo que suponía permanecer mucho tiempo sentado incluso en las personas que practican alguna actividad física unas cinco horas por semana.
Las largas jornadas de trabajo, dice el estudio australiano, no son la única causa de calentar la silla más de la cuenta. De acuerdo con esta investigación el 90% de los adultos pasan el 90% de su tiempo de ocio sentados.
“La gente tiende a pensar que esto no supone Ningún problema siempre que se haga algo de ejercicio diario, pero practicar media hora de actividad física cinco días a la semana no es un seguro que proteja contra las enfermedades crónicas”.
Los expertos recomiendan que en el trabajo, se ayude al organismo levantándose con frecuencia de la silla y caminando un poco por la oficina. “Se trata de buscar un mejor equilibrio entre estar sentado, estar de pie y andar”, dijeron los expertos.
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